En este episodio, el valle donde viven los Fruittis empieza a experimentar una extraña sequía, y todos están preocupados por la falta de agua. Mientras tanto, el clima empieza a volverse aún más impredecible y hay una gran tormenta que amenaza con inundar todo el valle. La lluvia, aunque es muy esperada, trae consigo problemas que dividen a los Fruittis: unos quieren aprovechar la lluvia para llenar sus reservas de agua, mientras que otros temen que las lluvias puedan ser peligrosas para sus hogares.